Resurrección de José Martí
Era el día 19 de Mayo del 2007 y se celebraba un acto solemne en el Cementerio
Santa Efigenia de Santiago de Cuba. Había miles de cubanos en un acto organizado por el gobierno, se le hicieron ofrendas
florales y comenzó un discurso de 32 horas y media a cargo de Fidel Castro. Las personas
ya no podían mas, hubo 150 desmayos cuando de pronto se ve una gran luz que emana de la tapa de la bóveda. Estas se quedan
perplejas al ver que esta se va levantando poco a poco y de pronto como un Gran Milagro aparece la figura de José Martí.
Hasta el propio Fidel Castro se queda paralizado, sus guardaespaldas no saben que hacer, el pueblo está callado.
Todos tiemblan. Hay mucho miedo especialmente por parte de las figuras del gobierno.
Martí se ve rodeado de una luz, firme, con traje negro muy gastado y zapatos rotos. Resalta su frente ancha y su
bigote frondoso.. Mueve su cabeza mirando a toda la multitud, levanta se mano derecha y les dice a todos “ Hermanos
cubanos, muchas gracias, estoy al tanto de todo. Le he pedido a Dios que me de la oportunidad de regresar junto a vosotros
para ayudaros a salir adelante en nuestro país y crear la sociedad anhelada por todos nosotros”.
La multitud rompe con un gran aplauso. El gobierno tiembla. Ese
hombre es muy peligroso. Martí sirve muerto pero vivo les puede hacer mucho daño. Hay que buscar la forma de neutralizarlo,
desaparecerlo, llevarlo para Mazorra y darle electro-shocks, etc.
Con una táctica muy sofisticada Fidel se dirige al público y les habla del milagro que acaba de producirse y que
finalmente la Revolución tiene al hombre que ha inspirado todo y que sin dudas será el cerebro que culminará la obra comenzada
y bla, bla, bla…….
Enseguida viene una ambulancia, lo introducen en ella y se lo llevan escoltado justificando que iría a recibir la
mejor atención médica del mundo.
Hay furor en toda la población cubana y la noticia enseguida se riega por todo el planeta.
En el exilio hay mucha alegría y a la vez están muy atentos de como va a reaccionar Martí ante el gobierno de Cuba,
Hay quien tiene miedo que este se una a Fidel y a la vez nos quedemos sin la figura mas importante que tenemos. Quedaría un
vacío muy grande y también se haría mucho daño.
Todo en Cuba gira alrededor del milagro. La isla está llena de reporteros de todos los canales de televisión más
importantes de cada país. El gobierno muestra una alegría muy grande pero hay preocupación sobre lo que estaría pasando con
Martí.
Al cabo de unos días ponen en la televisión un documental editado de José Martí desde la suite de un hospital que
nadie sabe cuál es y se ve bien. Está afeitado y bien peinado, su pijama esta limpio y al lado de la cama se ve un ramo de
rosas blancas. Ha aumentado de peso pero hay algo en su mirada que refleja como alguien que está un poco confundido o perdido.
No era el Martí que al salir de la tumba saludó con unas palabras muy coherentes. Sin dudas ha pasado algo y es motivo de
preocupación.
A pesar de la vigilancia que hay en torno a Martí, había la presencia de unos cubanos martianos de verdad a su alrededor
que al ver como lo están drogando y manipulando pues deciden ayudar a conseguirle una balsa y mandarlo para Miami.
En Cuba hay una movilización militar nacional buscándolo y ruedan cabezas en las Fuerzas Armadas, el Min-Int, el
Comité Central. Se divide toda la cúpula de gobierno y hay mucho nerviosismo.
En Miami por otro lado se informa que una balsa con un viajante solitario llegó hasta el pedazo de puente que quedó
en pie, parte de la ruinas del puente de la 7 Millas. Lo recogen y lo llevan a una escampavía. Desde Cuba hay una llamada
por teléfono diciendo que José Martí estaba para Miami solo, en una balsa casera. Enseguida todas las emisoras de radio y
televisión de Miami comienzan a dar la noticia y los cubanos comienzan a salir a las calles protestando para que se le de
asilo político. Comienzan a llegar reporteros de todo el Mundo. El Gobierno de Estado Unidos esta vez no lo va a poder deportar
aunque para ellos no tocó territorio firme norteamericano y si rompe la ley entonces tendría que darles visas a los 15 balseros
anteriores que llegaron ahí y los deportaron.
Todas las emisoras de radio y tv local hacen un llamado a los cubanos para paralizar Miami, detener sus carros
en medio de los expressways. Hacer vigilias, un gran desfile de más de un millón de cubanos por la Calle 8 del SW, etc.
Por fin al cabo de los días el gobierno norteamericano decide poner en libertad a José Martí. Hay quien dice que
lo deben acusar de terrorista pues desde territorio americano organizo armamento para la luchar en otro país.